En los últimos años el sector fintech tuvo un notable crecimiento, entre el 2018 y el 2022 el número de tecnológicas financieras creció 112% en América Latina y el Caribe, con un conteo de 2,482 plataformas, de acuerdo con un informe realizado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Sin embargo, distintos expertos en la industria pronostican una desaceleración en la inversión.
“En un momento como el actual, es cuando las mejores startups nacen, tenemos un mercado donde hay menos dinero y vamos a definir temas de economía financiera, pero no es la primera vez que algo así sucede, se ha visto en Estados Unidos y en Brasil muchas veces, tal vez se siente como algo nuevo en México”, comentó Vilash Poovala, cofundador y director general de Oyster Financial.
De acuerdo con Statista, México ocupa el segundo lugar con mayor inversión en empresas fintech en América Latina con 567 millones de dólares, detrás de Brasil que concentra una inversión por 2,000 millones de dólares.
Según lo mencionado por Poovala, las tecnológicas financieras deben esforzarse por volverse más creativas para tener mayor monetización. “El ecosistema está sano y los buenos negocios pueden conectar con buenos clientes”, acotó.
En los últimos años la inversión en plataformas de tecnología financiera creció en los círculos de inversionistas alrededor del mundo, con gran apetito por la región Latinoamericana.
De acuerdo con Finnovista, en el 2019 existían alrededor de 115 firmas de inversión fuera de América Latina que apuestan por el sector fintech de la región.
Expertos como Antonia Rojas, socia de ALLVP, apuntan a una disminución en el capital que fondea a las empresas de tecnología financiera debido a que se concentra en un menor número de fintech de mejor calidad. “Hay un movimiento, en todo el mundo, hacia la calidad más que a la cantidad, los inversionistas en general son más exigentes, ello es bueno para el ecosistema”, explicó Rojas.
Otros involucrados en el sector como Pablo Cuarón, vicepresidente de desarrollo comercial en Mastercard, coinciden en que las empresas de mayor calidad están mejor preparadas para un escenario difícil, “el ecosistema está en un momento más sólido y en buena posición para enfrentar lo que viene”, dijo.
Respecto a las oportunidades que deben atender las fintech para no quedarse fuera de los servicios de calidad Poovala, explicó que las empresas deben apuntar a segmentos poco atendidos y con necesidades específicas, como es el caso de las pymes en México.
“Específicamente las pymes tienen la necesidad de saber quién les pagó y cuando, es muy importante entender la parte de cómo la estructura de una empresa de tecnología financiera puede ayudar con la reconciliación y resolver este punto de dolor”, agregó el directivo.
Además, destacó que en el país se mantiene la apuesta por las finfech, debido al área de oportunidad en inclusión y digitalización de los negocios.
Información de El Economista